122 PYMAR 05. Construcción naval en España CONSTRUCCIÓN NAVAL EN ESPAÑA 1 Puede encontrar más información sobre este indicador en el capítulo 8 del presente informe. A diferencia de la tendencia registrada a nivel europeo, con recortes interanuales en el número de contratos cercanos al 35%, los 23 buques formalizados en España durante el pasado ejercicio representaron un incremento interanual del 28%, lográndose alcanzar unos valores muy próximos a los de 2019, año previo a la pandemia. En este mismo sentido, el índice de la actividad productiva ponderada1, indicador que tiene en cuenta las puestas de quilla, las botaduras y las entregas registradas durante un periodo de tiempo determinado, se incrementó interanualmente en 2021 más de un 15%, situando a 2021 como el ejercicio de la recuperación del sector en España. La apuesta de los astilleros españoles por la diferenciación y la tecnología, unida a su gran capacidad de adaptación a entornos cambiantes, fueron clave para sortear con éxito los fuertes desequilibrios registrados en los mercados en los últimos años, características que continuaron siendo una pieza fundamental en el logro de los resultados de 2021. De este modo, y a pesar de la mejora en las condiciones sanitarias derivadas de la pandemia, la cadena de suministro global continuó mostrando importantes desajustes durante 2021. La abrupta reactivación económica registrada durante el año produjo desequilibrios entre la oferta y la demanda de bienes y materias primas, generando un incremento en los precios y plazos de entrega que afectaron directamente a los astilleros. A pesar de estas circunstancias, la enorme resiliencia del sector naval español posibilitó que, durante el año 2021, España volviese a incrementar su peso específico a nivel internacional, logrando mejorar su posicionamiento entre las principales potencias constructoras. Como ejemplo, España se situó como la segunda potencia de la Unión Europea en número de unidades contratadas y en unidades entregadas, volviendo a despuntar en aquellos segmentos de mercado con mayor proyección y crecimiento, en contraposición a otros países europeos que mantuvieron una fuerte dependencia de mercados en claro retroceso. La construcción naval española volvió a mostrar una alta diversificación con más de una decena de tipologías diferentes en su cartera de pedidos, en general caracterizadas por su elevado contenido tecnológico y entre los que se encontraron buques dotados de nuevos sistemas propulsivos con menor huella medioambiental con soluciones basadas en la utilización del hidrógeno verde o baterías. Entre la amplia gama de unidades en construcción destacaron los buques offshore para el mantenimiento y puesta en marcha de campos eólicos marinos, los buques de investigación oceanográfica, los grandes pesqueros, los buques de pasaje y los buques para la acuicultura marina, entre muchos otros. ESPAÑA INCREMENTÓ SU PESO ESPECÍFICO ENTRE LAS PRINCIPALES POTENCIAS CONSTRUCTORAS, DESTACANDO EN SEGMENTOS DE MERCADO CON MAYOR PROYECCIÓN Y CRECIMIENTO
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